Aductores o muslos internos

Ejercitar los aductores es esencial para asegurar que las piernas se encuentran en un buen estado general. Los muslos son la parte más olvidada de las piernas, y muchas personas no le dan la suficiente importancia a la tonificación de los muslos internos.

Hay muchas razones por las que hay que ejercitar estos músculos tan olvidados:

Se reducirá la grasas excesiva en la parte interior del muslo, lo que hará que la ropa nos quede mejor y reducirá las rozaduras al correr.
Dará mayor fuerza para poder levantar objetos con las piernas, correr y hacer movimientos ágiles en general.
Aumentará la flexibilidad de los muslos y ayudará a reducir el riesgo de lesiones.

Estos son sólo algunos de los beneficios más simples de ejercitar nuestros músculos internos del muslo, que nos facilitarán algunos movimientos en nuestra vida diaria.

Ahora os enseñaremos varios ejercicios para fortalecer estos músculos:

Una de las mejores formas de trabajar los aductores es haciendo Elevaciones de piernas. Son ejercicios que utilizan el propio peso de las piernas para el entrenamiento, y son muy fáciles de hacer ya que no requieren un don extra para la coordinación. Cualquiera puede levantar las piernas para entrenar la cara interna del muslo incluso en cualquier sitio donde haya espacio suficiente.
Empuje fitball. Este ejercicio es bastante completo ya que fortaleceremos tanto los músculos internos como externos del muslo.Tumbados lateralmente en el suelo, empujaremos la fitball presionando los músculos internos y externos hacia abajo, haciendo contracción varios segundos y volviendo a la posición inicial.
Máquina aductores. Debemos apoyar la zona lumbar en el respaldo para un buen control del ejercicio. Juntaremos las piernas hasta que los cojines que sujetan nuestras rodillas se unan en el centro delante de nuestro cuerpo. Mantenemos la posición varios segundos y cerramos lentamente a la posición inicial.

Atención a la posición de la espalda, ya que nos ayudará a controlar el movimiento y también cuidado con el peso que queramos colocarnos, podemos hacernos daño al forzar otros músculos del cuerpo con un peso excesivo.
No os olvideis de estirar bien los aductores: